 Volver
Carta a los Efesios
Capítulo 
1 |
También ustedes estaban muertos por sus pecados y trasgresiones.
|
2 |
Seguían la conducta de este mundo y los dictados del jefe que manda en el aire, el espíritu que actúa en los rebeldes…
|
3 |
Lo mismo que ellos, también nosotros seguíamos los impulsos de los bajos deseos, obedecíamos los caprichos y pensamientos de nuestras malas inclinaciones, y naturalmente, estábamos destinados al castigo como los demás.
|
4 |
Pero Dios, rico en misericordia, por el gran amor que nos tuvo,
|
5 |
estando nosotros muertos por nuestros pecados, nos hizo revivir con Cristo –¡ustedes han sido salvados gratuitamente!–;
|
6 |
con Cristo Jesús nos resucitó y nos sentó en el cielo,
|
7 |
para que se revele a los siglos venideros la extraordinaria riqueza de su gracia y la bondad con que nos trató por medio de Cristo Jesús.
|
8 |
Porque ustedes han sido salvados por la fe, no por mérito propio, sino por la gracia de Dios;
|
9 |
y no por las obras, para que nadie se gloríe.
|
10 |
Somos obra suya, creados por medio de Cristo Jesús para realizar las buenas acciones que Dios nos había asignado como tarea.
|
11 |
Por tanto, ustedes los que en un tiempo eran paganos de cuerpo, llamados incircuncisos por los que se llamaban circuncisos de cuerpo, recuerden
|
12 |
que entonces vivían lejos de Cristo, excluidos de la ciudadanía de Israel, ajenos a la alianza y sus promesas, sin esperanza y sin Dios en el mundo.
|
13 |
Pero, gracias a Cristo Jesús los que un tiempo estaban lejos, ahora están cerca, por la sangre de Cristo.
|
14 |
Porque Cristo es nuestra paz, el que de dos pueblos hizo uno solo, derribando con su cuerpo el muro divisorio, la hostilidad;
|
15 |
anulando la ley con sus preceptos y cláusulas, reunió los dos pueblos en su persona, creando de los dos una nueva humanidad; restableciendo la paz.
|
16 |
Y los reconcilió con Dios en un solo cuerpo por medio de la cruz, dando muerte en su persona a la hostilidad.
|
17 |
Vino y anunció la paz a ustedes, los que estaban lejos y la paz a aquellos que estaban cerca.
|
18 |
Porque por medio de Cristo, todos tenemos acceso al Padre por un mismo Espíritu.
|
19 |
De modo que ya no son extranjeros ni huéspedes, sino conciudadanos de los consagrados y de la familia de Dios;
|
20 |
edificados sobre el cimiento de los apóstoles, con Cristo Jesús como piedra angular.
|
21 |
Por él todo el edificio bien trabado crece hasta ser santuario consagrado al Señor,
|
22 |
por él ustedes entran con los demás en la construcción para ser morada de Dios en el Espíritu.
|
|
 Volver
|